Internet nacía en 1990 y el primer diario digital del país en estar online seria “Los Andes” en septiembre de 1995, en su momento contaba con una computadora en la cual se iban cargando los principales titulares cada tres días. Al cambio que vivimos hoy y la vorágine de tener la primicia en el ciberespacio antes que nadie para encontrar las visitas y marcar tendencia que nos hagan vender la pauta mejor que la competencia.
Una lucha desenfrenada donde no se contabilizan las bajas como en una guerra sino los likes, las compartidas, las métricas de medición que nos indican si lo escrito está siendo visto por la gente desde diferentes artefactos móviles en donde los teléfonos celulares son los protagonistas del día a día ,hora a hora, minuto a minuto y segundo a segundo porque como el dicho popularmente conocido “El tiempo es dinero” es una marca a fuego.
La antítesis el diario en papel , a contramano de la inmediatez en que vivimos, dos caras de la misma moneda de llevar las noticias a la comunidad . Con la ventaja de que sobre esa hoja los periodistas pueden explayarse en el contenido y darle un enfoque diferente de lo digital. Pero solo puede enterarse el autor el alcance de la nota por el boca a boca. Pero en contrapartida de la migración de la pauta a lo digital quizás por los cambios que vivimos en materia económica , el ahorro y las nuevas generaciones conocidas como nativos digitales donde la tecnología forma parte de sus vidas.
Que esto no te haga pensar que el papel ha muerto aun sigue respirando y está con vida, los mejores profesionales están en él, y sus notas son verdaderos textos literarios que hacen que aun eso medio persista. Pero el periodismo digital es la disciplina del futuro y hacia ese lado van todos los caminos. A lo analógico no le quedara otra que mutar y renovarse para no desaparecer. Seguramente se transformaran en periódicos y no en diarios. En donde la profundidad de la información sea su sello.
Los caminos digitales ya están impuestos y siguen creciendo a razón de que a cada segundo se registran 800.000 nuevas páginas web, 278.000 tuits, 48.000 post y 1,8 millones de me gusta en Facebook, 2 millones de búsquedas en Google, 36000 fotos en Instagram . Y las cifras aumentan exponencialmente.
El imperio digital como el romano seguro no caerá, y conquistara nuevas tierras pertenecientes a lo analógico. Parafraseando el final de una película, no hay una capital a la cual destruir, su centro nervioso es la “World Wide Web” y su fuerza el hipertexto ahora enlazado con lo multimedia hace que todo fluya hacia él en los navegadores web , todos las rutas nos lleven a hacia ese lugar. Y el auge de los netamente multimedial sobre el texto y el crecimiento del consumo de esas noticias le dan una larga vida. El periodista o reportero gráfico que no se adapte a las nuevas tecnologías desaparecerá o utilizando la teoría de la evolución de Darwin : “Las especies que sobreviven no son las más fuertes ni las más inteligentes, sino aquellas que se adaptan mejor al cambio”.