Anoche el Club Deportivo Maipú no pudo vencer al débil San Lorenzo de Alem (Catamarca), que propuso poco y le empataron sobre el final con un tiro libre al palo del arquero. Fue 2 a 2, por la fecha 7, en el Estadio Omar Higinio Sperdutti y el local dejó pasar la chance de seguir en la cima de la Zona Revalida, junto con Huracán Las Heras que si obtuvo el triunfo.
Realidades distintas pero realidades en fin, se vieron en la cálida noche de Maipú. El local debía ganar para no despegarse de la punta y la visita, no perder y sumar para escapar de los puestos de abajo, en donde lo acecha el descenso. Así y todo, la propuesta y la redonda fueron toda la noche del Botellero que intentó marcar las diferencias pero en la primera etapa no tuvo la claridad y la certeza a la hora de definir en lo poco que llegó.
El partido se puso áspero y trabado por momentos en la mitad de la cancha, y a los dirigidos por Carlos Sperdutti, les faltó en ese PT, la chispa para ir a buscarlo con todas sus armas; sin embargo el “Mágico” Santiago González se las ingenió y tuvo un tiro que se fue sobre el arco (la más clara del Pt) y un centro suyo fue desviado por un rival e impactó en el travesaño.
Fueron buenos los primeros 45’ del Cruzado pero sin duda faltó creatividad de ¾ de cancha hacia delante y certeza a la hora de hacer el pase final, varios centros sin destino y varios corners desperdiciados, salvo uno que impactó Lucas Masoero de cabeza y se fue pegado al poste. El árbitro del encuentro Luciano Julio, fue muy permisivo y dio lugar a varias faltas, debió sacar al menos una amarilla por lado y no lo hizo.
En el complemento el Rojo, salió con otra actitud (Huracán ganaba 1 a 0) y en 3’ minutos Claudio Ojeda sacó un tremendo remate de fuera del área, que fue desviado por Fernando Vitande, el arquero Ocotero que tuvo una buena noche. Cuando el local empezaba a jugar mejor llegó el gol de San Lorenzo, en su primera ocasión clara, Nahuel Figueredo tiró un centro al corazón del área y Alejandro Bordonaro se anticipó al central, la punteó y con complicidad de Damian Tello decretó la primera emoción de la noche en 13 minutos.
Ese baldazo de agua fría fue bien recibido por Maipú que se despertó y encendió las ganas de ganarlo, comenzó a ir para adelante con fiereza y actitud. A los 20 minutos se encontró con el gol, el “Toro” Gonzalo Parisi la empujó bajo el arco tras el centro del recién ingresado Matías Persia. Con el partido empatado, el local no bajó la intensidad y las llegadas comenzaron a llover, el artífice siempre el hábil González, que a falta de 7 minutos provocó la expulsión del central Juan Carlos Tissera por segunda amarilla, ahora si todo estaba dado para sentenciar la historia.
Con el tiempo cumplido y la desesperación por la victoria, Oscar Amaya tuvo la tranquilidad para habilitar con un lindo globo a Francisco Agost, que sin dejarla picar la clavó en un ángulo, para el delirio de todo el estadio. Ya solo faltaba aguantar los 4 minutos de adición y todo parecía indicar que los 3 puntos se quedaban en casa, pero en última jugada del encuentro, el Santo de Catamarca se encontró con un tiro libre en la puerta del área y Figueredo cristalizó el empate con un remate raso y sin tanta potencia al palo del arquero.
La sensación tras el empate fue similar a la derrota, y los locales se retiraron cabizbajo a diferencia de la visita que festejó el empate como si fuera un triunfo.
El Club Deportivo Maipú dejó pasar una gran chance ante un rival que solo llegó dos veces al arco y fue eficiente. Quedó relegado a la segunda posición y el domingo deberá visitar al puntero Huracán Las Heras, en lo que va a ser una verdadera final en vistas al soñado ascenso al Nacional B.
Foto: Prensa Deportivo Maipu