Desde muy temprano la gente se fue dando cita en las inmediaciones del aeropuerto de la Ciudad de Mendoza. La zona no lució como todos los días ya que se vio gran cantidad de gente caminando y en medios de movilidad que se iban dirigiendo a ese punto, donde desde las 22:00 hs. Ciro y la Orquesta Filarmónica Mendoza comenzarían a tocar. Para amenizar la espera, en el “Patio Malbec”, se montaron varios foodtrucks de comidas y un pequeño escenario desde donde los artistas interpretaron tonadas y cuecas mendocinas.
Para la hora de inicio del evento ya no cabía ni un alfiler, se estima que había alrededor de 22.000 almas.
La orquesta Filarmónica de Mendoza, bajo la dirección del Maestro César Iván Lara, comenzó puntualmente a las 22:00 a tocar los temas preparados que hicieron alusión a la raíz latinoamericana y fueron ovacionados por el público presente. Luego llegó el turno de Melisa Budini, Andrea Leguizamón y Vanina Fernandez, las voces jóvenes de la música folclórica, que interpretaron cuecas, gatos y tonadas. La música cuyana sirvió para que el Gobernador, vice gobernador, intendentes y reinas comenzaran con el clásico ritual de la cosecha de los viñedos del aeropuerto.
Cuando el reloj marcaba las 23:00 hs comenzó a sonar la armónica de Ciro Martinez que interpretó un fragmento del Himno Nacional Argentino, seguido por los 80 músicos que integran la Orquesta Filarmónica de Mendoza. Los arreglos de los temas que interpretó Ciro fueron realizados por Joaquín Guevara y Juan Emilio Cucchiarelli.
Luego del fragmento del Himno Nacional le siguieron Mírenla, Vas a bailar, Ando ganas y Canción de cuna, para la parte melódica. Luego Ciro dijo “Es hora de ponerle un poco de rock a la cosa” y sonó“Antes y después”. Antes de que se escuchara“Tal vez”, Ciro brindó por el vino mendocino y por Mendoza. A esta altura el público ya estaba al lado del escenario y el músico aprovecho ante los canticos de la gente para decir “que el agua es de todos y para todos y hay que cuidarla”. Luego siguieron “Ruidos” y“Agua” con la participación de un coro de niños. Para finalizar interpretó “Pensar en nada” de León Gieco y se despidió, pero ante la insistencia del público volvió y agradeció a la orquesta, a los arregladores y a los músicos e interpretaron“Verano del 92”. Pasó un gran músico por Mendoza y dejó un gran show que la gente se lo retribuyó con el cariño y afecto de siempre. Será recordada esta edición por la de mayor concurrencia desde que se realiza y porque todo se realizó en un marco de paz y respeto de todos los presentes. Ya estamos ansiosos por lo que se vendrá para la próxima edición!!